El plantel profesional del Club Atlético San Lorenzo de Almagro volvió a reunirse este lunes por la mañana en la Ciudad Deportiva con la idea de iniciar la última semana de entrenamientos del año, ya sin competencia oficial. Sin embargo, la jornada terminó sin práctica y volvió a quedar expuesta la gravedad del momento institucional.
La decisión fue tomada por los propios jugadores, que se cansaron de las promesas incumplidas por parte del presidente Marcelo Moretti. Si bien el acuerdo interno era extender los trabajos hasta el viernes, el conflicto económico a raíz de premios adeudados volvió a bloquear el normal desarrollo de la actividad.
Un lunes sin fútbol en medio del conflicto
El plantel se presentó en el predio, pero finalmente no realizó entrenamiento. El motivo vuelve a ser el mismo que atraviesa al club desde hace meses: incertidumbre, deudas, promesas que no se cumplen y una conducción sin rumbo.
Más allá del acompañamiento económico parcial en tema sueldos que brinda la Asociación del Fútbol Argentino, a cargo de Claudio Tapia, hay compromisos que dependen exclusivamente de San Lorenzo y que continúan sin resolverse.
Un clima cada vez más tenso
San Lorenzo ya no tiene objetivos deportivos en el corto plazo, tras quedar eliminado y dar por finalizada su participación competitiva en la temporada. Aun así, jugadores y cuerpo técnico habían consensuado permanecer entrenándose esta semana para mantenerse activos y, sobre todo, esperar definiciones institucionales.
Pero la realidad vuelve a cambiar día a día. Lo ocurrido este lunes deja abierta una incógnita sobre cómo continuará la semana de un plantel continúa atrapado en el medio de una crisis sin precedentes. Sin competencia, sin certezas y con compromisos pendientes que no se resuelven…
