Con la novedad del regreso de Juan Ramírez, que venía entrenando diferenciado por una fatiga muscular, Diego Monarriz realizó el primer ensayo formal pensando en revertir la imagen que San Lorenzo dejó el lunes ante Newell’s y conseguir el primer triunfo en el 2020, el próximo domingo contra Vélez en el Nuevo Gasómetro.
Y fueron dos equipos diferentes. Primero, el 11 que parece estar instalado como el ideal del entrenador y que viene repitiendo desde que arrancó el año. Con la habitual línea de cuatro en el fondo, con Poblete y Torito Rodríguez como volantes centrales, con Oscar y Ramírez en las bandas acompañando en ataque a los puntas Angel y Uvita Fernández.
Pero un rato más tarde, el DT decidió hacer otra prueba. Una apuesta que venía pensando y ha utilizado durante los cinco partidos de interinato durante el 2019: sumó a Gonzalo Rodríguez como stopper para armar una defensa de cinco y sacó a un volante, que en este caso fue Ramírez. Además, ingresó el juvenil Julián Palacios por Rodríguez.
Si elige repetir por tercera vez consecutiva en el torneo el mismo esquema y los mismos nombres, el once sería con Sebastián Torrico; Gino Peruzzi, Fabricio Coloccini, Alejandro Donatti, Bruno Pittón; Oscar Romero, Gerónimo Poblete, Diego Rodríguez, Juan Ramírez; Ángel Romero y Nicolás Fernández.
En cambio, si retoma la idea inicial desde que agarró el primer equipo, la formación iría con Sebastián Torrico; Gino Peruzzi, Fabricio Coloccini, Gonzalo Rodríguez, Alejandro Donatti, Bruno Pittón; Oscar Romero, Gerónimo Poblete, Julián Palacios; Ángel Romero y Nicolás Fernández.
Por ahora se trató de un entrenamiento. De un ensayo que Monarriz suele utilizar para reforzar conceptos y movimientos. Aunque claramente fue también un indicio de que está evaluando la chance de poner el esquema que le dio resultados durante el tramo final del año pasado. Mañana habrá novedades…