Si bien todavía quedan cinco fechas para finalizar el campeonato, la dirigencia de San Lorenzo empieza mirar de reojo lo que será el próximo mercado de pases. Entre otras situaciones a atender, está la de un jugador que finaliza su contrato el 31 de diciembre y la de cuatro futbolistas que terminan sus vínculos el próximo 30 de junio.
Alejandro Donatti es el único de los cinco que culmina su vínculo a final de año. El Flaco llegó a Boedo en enero del 2020, su aporte fue a cuentagotas y tuvo nula continuidad debido a las recurrentes lesiones musculares (su último partido fue contra Colón, por la fecha 15). Todo indica que transita sus últimas semanas y quedará con el pase en su poder.
Los contratos que se vencen a mediados del 2022 son los de Gabriel Rojas, Gino Peruzzi, Bruno Pittón y Ezequiel Cerutti, quienes quedarán en condiciones de negociar con otra institución a partir del 1 de enero si sus situaciones no se resuelven. Aún no hubo novedades con respecto a la renovación de los mismos, sí algunas charlas informales.
Rojas hizo todas las inferiores en el club y volvió en junio del 2020 luego de su préstamo en Peñarol. Tuvo poca continuidad desde su regreso y es probable que quiera cambiar de aire. Peruzzi, que llegó a principios del 2019, es uno de los jugadores que más jugó en el campeonato pero perdió el puesto desde la asunción de Monarriz. De momento no está definido su futuro.
En la misma situación está Pittón. Arribó a mediados de 2019 al Ciclón y si bien fue el mejor en aquel semestre (fue el goleador del equipo), su nivel decayó notoriamente y hoy tiene poco rodaje en la formación inicial. Cerutti, que regresó a mediados de año tras su cesión en Coritiba, viene de lesión en lesión y tampoco se sabe qué pasará con él. Es uno de los contratos más altos del plantel.