Es cierto, apenas se trató de una primera impresión. Pero la sensación que dejó el pibe Jeremías James en su debut es que parece un futbolista que le puede aportar mucho a San Lorenzo en el futuro inmediato. Con mucha personalidad, fue uno de los puntos altos dentro del 11 alternativo que plantó en Montevideo y hasta algunos se animaron a compararlo con el mismísimo Kannemann.
El hecho es que este jueves, el club comunicó una grata noticia para el defensor de 20 años. Es que después de algunos días de negociaciones, el futbolista y los dirigentes se pusieron de acuerdo para la firma de su primer contrato profesional. El mismo tiene una duración de dos años. Es decir, hasta diciembre del 2023.
El joven nacido en Trelew tiene una historia de vida particular, ya que cuando apenas tenía 9 años le habían detectado leucemia. Tres años más tarde, recuperado de la dura enfermedad, arrancó jugando en Los Aromos, después pasó a Huracán (ambos clubes de su ciudad), emigró a la CAI de Comodoro Rivadavia y tras su excursión en el Sur volvió a Trelew para jugar en Racing.
✍️ Jeremías James, quien ayer concretó su debut, hoy firmó contrato con #SanLorenzo hasta diciembre de 2023, acompañado por Mauro Cetto, Director de Fútbol del Club.
🙌 ¡Muchos éxitos! pic.twitter.com/5RtA0vm8Y5
— San Lorenzo (@SanLorenzo) January 27, 2022
Justamente en este club captó la atención de Fernando Kuyumchoglu y el ya ex coordinador de las inferiores de San Lorenzo lo acercó a Boedo. Lo hizo a principios del 2019, con 18 años. Luego llegó el parate por la pandemia y en su regreso integró el plantel de la Cuarta División y empezó a jugar en Reserva.
A raíz de la ola masiva de contagios en la previa del arranque de la pretemporada en Pilar, James subió a Primera junto a otros juveniles que formaban parte del plantel del Pipi Romagnoli y desde ese momento no bajó. La auspiciosa aparición de este zurdo de 1,91 de altura y gran porte fue una grata noticia para el deté de San Lorenzo. Y también para los hinchas.