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San Lorenzo le ganó a Nacional por penales

Hay una intención. Hay una forma. Una base desde que Troglio se hizo cargo de este San Lorenzo. Pero también sobran inconsistencias, desprolijidades, desajustes y algunas dudas en el funcionamiento que, por ahora, se disimulan con resultados. Y otra vez lo hizo. No fue un buen partido del Ciclón ante Nacional, pero supo reponerse a las adversidades y volvió a festejar en el verano. Ahora por penales.

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San Lorenzo zafó a los cinco minutos cuando el cabezazo de Otormín dio en el palo, que también tuvo un buen remate desde afuera del área y un tiro libre que pasó cerca del ángulo, pero no pasó lo mismo a los 26 después de un error defensivo. ¿Qué pasó? Pelota larga en la salida local, Zapata salió a cortar a destiempo, Gattoni quedó mal parado, Peruzzi llegó tarde y el Colo Ramírez encontró un rebote en el área para el 1-0.

Fue entonces que un equipo que estaba pensado para contener, tuvo que cambiar sobre la marcha. Llegó una reacción tibia, con algunos intentos del lado de Centurión. Pero solo por un par de minutos. No podía tener la pelota, no la podía manejar. Demasiada calma, demasiada lentitud en la circulación ante un dinámico Nacional, que hasta tuvo posibilidades de aumentar el marcador sobre el final del primer tiempo.

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En el arranque del complemento, Troglio no hizo cambios pero sí movió de lado a Fernández Mercau. El DT había sorprendido ubicándolo en el arranque por la banda derecha, pero no funcionó y lo corrió al sector izquierdo, un lugar más habitual para el juvenil. Nacional le cedió la pelota y la reacción se dio a medias. Tenía la pelota, pero lejos del arco contrario. Le faltaban ideas.

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Pero lo que San Lorenzo no pudo encontrar por falencias propias del juego, sí lo pudo hacer en una pelota parada. Un centro desde la izquierdo encontró solo a Gordillo, que desvió la pelota y Centurión se zambulló en el segundo palo para estampar el 1-1. El empate, incluso, dejó mejor parado al elenco azulgrana, que minutos más tarde encontró la ventaja con un golazo de Martegani, quien recibió una tremenda habilitación de Uvita, esquivó a Rodríguez y definió con el arco a su merced.

Justo cuando el Ciclón podía acomodarse aún mejor con el resultado a favor, otro error propio le cortó el clima. Zunino metió un buen derechazo después de un lateral, Batalla llegó bien al palo para desviar la pelota pero dio un rebote largo con el pecho que aprovechó Gigliotti para el 2-2 definitivo. Así, la Copa José Sanfilippo se definió por penales.

En la definición desde los doce pasos, San Lorenzo no falló ningún disparo (Ortigoza, Gabriel Rojas y Sabella, en ese orden). Batalla le atajó un penal a Monzeglio y otro a Sosa para redimirse del fallo en el empate y el remate al palo de Ramírez le dio la victoria 3-1 en el Gran Parque Central. Y de nuevo a festejar.

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