Gonzalo Bergessio anunció este jueves al mediodía que decidió poner punto final a su carrera como futbolista profesional. A los 39 años, el delantero publicó un mensaje en sus redes sociales para dar a conocer su decisión y agradeció a todos los clubes donde jugó desde su debut con la camiseta de Platense en 2001.
Si bien no pudo conseguir ningún título, el paso de Lavandina por San Lorenzo dejó una huella imborrable. En Boedo tuvo dos etapas, en la primera llegó de la mano de Ramón Díaz y jugó de principios del 2008 hasta mediados del 2009, y la última bajo la dirección técnica del uruguayo Diego Aguirre, entre 2016 y 2017.
Sin dudas su primer ciclo fue mejor que el segundo. En ese momento, el delantero cordobés brilló en San Lorenzo: disputó un total de 70 partidos y anotó 28 goles. Ya en el segundo le costó: apenas jugó 25 encuentros y marcó 2 tantos. Se fue enemistado con el DT, que no lo consideró en los dos últimos partidos del torneo, y también disparó contra el ex presidente Matías Lammens.
Pero si hay que hacer un repaso de sus mejores momentos en San Lorenzo, automáticamente aparece en mente la noche del 8 de mayo de 2008. El recuerdo sigue latente por cómo el Ciclón le empató el partido de vuelta a River y el pase histórico a los cuartos de final de la Copa Libertadores ante el silencio del público local y la locura de los Cuervos que coparon la tribuna visitante del Monumental.
Luego de la victoria 2-1 en el Nuevo Gasómetro, en Núñez el Millonario se había puesto en ventaja 2 a 0 e inclusive jugaba con dos hombres de más por las expulsiones del Burrito Rivero y Jonathan Bottinelli. Pero San Lorenzo apeló al fuego sagrado: Bergessio descontó a los 24′ del complemento y tres minutos marcó el 2-2 definitivo para cerrar una jornada memorable.
De aquella serie emocionante, también se recuerda la polémica declaración de Oscar Ahumada. “Cuando el partido se puso 2 a 1 se escuchó un silencio atroz”, dijo en caliente el jugador de River ya consumada la eliminación del equipo que dirigía Diego Simeone.
