Está al frente del plantel hace ocho días, cuando la dirigencia decidió prescindir de los servicios de un histórico como Rubén Darío Insua. Pero recién hace algunas horas que conoce de la responsabilidad suprema que le tocará afrontar: este viernes Leandro Atilio Romagnoli dejó de ser interino para convertirse oficialmente en el nuevo técnico de San Lorenzo.
“Muy contento, agradecido a todos los directivos por darme esta posibilidad. Me vengo preparando hace un tiempo, conozco al club. Es una oportunidad única para mí. Tratar de estar a la altura. Tenemos un gran plantel y lo más importante son los jugadores”, fueron las primeras palabras del Pipi luego de una breve bienvenida por parte del presidente Marcelo Moretti y el encargado del fútbol Néstor Ortigoza.
“La ilusión de ser técnico de San Lorenzo siempre pasó por mi cabeza. Muy respetuoso porque estaba Rubén (Insua) y era consciente que en cualquier momento me podía tocar, no en el presente sino en el futuro porque estaba él, un ídolo al que la gente la quiere mucho, y yo sabía que tenía que seguir haciendo experiencia. Es un orgullo que se terminan decidiendo por mí para que me haga cargo del equipo“, comentó después, reiterando sus deseos de agarrar la Primera.
Y luego, agregó: “Me vengo preparando hace dos años y medio, que era la idea mía para hacer un poco de experiencia para estar mejor el momento que me toque. En el momento que me ofrecieron el cargo les dije que sí, tengo ganas y me siento capacitado para estar. Siempre pensás que te puede tocar porque estás en la Reserva y más como es el fútbol argentino, que los entrenadores no duran mucho. No estaba apurado, pero llegó el momento, tocó. Si bien había estado alguna vez con interino y las cosas fueron bien, ahora estoy feliz”.
Además, hizo hincapié en lo que se le viene a San Lorenzo en la Copa Libertadores. “Somos conscientes de la clase de partidos que vamos a afrontar. Sabemos que contra Liverpool decide porque no arrancamos de la mejor manera y es un partido como para volver al triunfo y volver incorporarnos en la Copa. De no ser así quedaríamos con una derrota casi afuera y si bien quedan tres partidos con dos de local, con un empate quedaríamos un poco lejos”.
Y por último se refirió a cómo está el plantel: “Al partido ya lo venimos charlando con el grupo, hay que estar mentalizados, fuertes. Va a ser difícil, los equipos uruguayos se hacen fuertes, pero tenemos un plantel bastante largo, con jerarquía y con chicos como para afrontar esta clase de partidos. La idea es estar bien, trabajar todos los días, superarnos y poner a San Lorenzo lo más alto posible. Nos toca en una situación que no es la mejor en la Copa, pero hay que luchar“.