Después de tres meses, la Comisión Directiva de San Lorenzo volvió a sesionar. Fue la primera reunión presidida por Julio Lopardo desde que asumió como presidente interino, el pasado 8 de mayo, pero el tema que domina la agenda institucional y la preocupación de los hinchas —la situación de Marcelo Moretti— no se trató oficialmente.
El conflicto en torno al dirigente, actualmente de licencia y bajo investigación del Tribunal de Ética de la AFA, quedó fuera del orden del día. Si bien se habría hablado de la situación puertas adentro, su exclusión del temario generó malestar entre los socios, que esperaban definiciones en medio de la crisis política que atraviesa el club.
La sesión tuvo además varias ausencias: no estuvieron Javier Allievi (por motivos personales), Néstor Ortigoza, Marcelo Culotta (de vacaciones), Alejandro Tamer ni Mariano Marino, el vocal suplente que debía asumir a la CD debido a las renuncias de los últimos tiempos. Sí lo hicieron, tal como estaba previsto, Leonardo Virardi y Belén Lugones
Entre las resoluciones más importantes, la dirigencia aprobó la convocatoria a la Asamblea, la misma que debería haber tratado el tema Moretti si la AFA no intervenía para frenar a San Lorenzo. Se hará el 29 de septiembre a las 18 horas en el estadio, donde se tratarán la Memoria y Balance 2023-2024 y el Presupuesto 2025-2026.
Otro punto destacado fue la disposición de un bono único y obligatorio de $10.000 para el clásico contra Huracán, correspondiente a la séptima fecha. Según informó el club, lo recaudado se destinará —en principio— a la mejora de las instalaciones del fútbol juvenil, aunque el comunicado oficial aclara que llegado el momento se informarán los detalles y el destino final de los fondos.
Para conocer más detalles, ingresá al informe oficial de San Lorenzo.