San Lorenzo atraviesa un momento de incertidumbre respecto al futuro de uno de sus máximos referentes. Mientras el equipo se prepara para volver al trabajo el próximo lunes 16 de junio en la Ciudad Deportiva, todo indica que Iker Muniain no se presentará al inicio de la pretemporada, lo que abre interrogantes sobre su continuidad.
“Crucé unos mensajes con Iker y está esa posibilidad. Está descansando en su país resolviendo cosas personales, con sus hijos, que ha extrañado mucho”, reconoció en Splendid el flamante entrenador Damián Ayude, dejando entrever que la ausencia del vasco, que tiene contrato hasta diciembre pero una cláusula le permite rescindir hasta el 30 de junio, es algo que ya se maneja dentro del cuerpo técnico.
Las razones que alejan a Muniain no se reducen a lo futbolístico. Por un lado, la distancia con su familia y su intención de pasar más tiempo con sus hijos juegan un papel clave. A eso se le suma el momento crítico que atraviesa San Lorenzo a nivel institucional, con deudas, cambios de mando y una economía golpeada que vuelve difícil sostener contratos elevados como el suyo.
“Evito ser invasivo y veremos qué se resuelve estos días. Ojalá vuelva a estar con nosotros lo antes posible”, agregó Ayude, aunque sus palabras reflejan más un deseo que una certeza. El silencio del propio futbolista también alimenta las especulaciones, y en Boedo ya no descartan que el ciclo se corte antes de tiempo.
Desde su llegada en septiembre del año pasado, Muniain disputó 26 partidos con la camiseta azulgrana y marcó cuatro goles. De gran carisma, rápidamente se ganó el cariño de la gente y mostró gestos públicos de identificación con el club. Sin embargo, el escenario actual parece empujarlo a una salida anticipada, y su regreso a Buenos Aires hoy es una incógnita.