in

Barracas le dio un duro golpe a San Lorenzo

El Ciclón empujó hasta el final, le anularon dos goles en el VAR y se quedó sin invicto en el campeonato al caer 2-1 ante el Guapo. Bareiro, el único gol azulgrana.

Le cortó el envión. Barracas Central le dio un duro golpe a San Lorenzo. El equipo de Rubén Insúa estaba en un momento propicio de comenzar a despegar luego de un arranque auspicioso, pero estuvo lejos de mostrar una buena actuación en Floresta y no pudo levantar vuelo. Fue 2-1 para el Guapo y se terminó el invicto azulgrana en la Liga Profesional.

La derrota fue un cachetazo para el Ciclón. Porque si bien el pésimo estado del campo de juego hizo todo más difícil, friccionado y poco vistoso, el Guapo le convirtió dos goles en sus únicos dos remates claros al arco de Augusto Batalla, uno de Bruno Sepúlveda y otro de Neri Bandiera después de una siesta de la defensa azulgrana apenas dos minutos después del empate de Adam Bareiro.

A San Lorenzo le costó tener claridad para fabricar espacios contra un adversario que se abroqueló y procuró achicar espacios hacia atrás durante la segunda etapa. Y cuando pudo llegar con peligro para Maximiliano Gagliardo, el VAR intervino para negarle la posibilidad de la igualdad: primero por un claro offside de Iván Leguizamón y más tarde por otro muy polémico a Jeremías James, que terminaba empujando en el segundo palo.


Barracas lo ganó con poco y se amparó en una receta simple. Sus armas fueron el orden y el sacrificio. Para el Ciclón fue una derrota que expuso una realidad que excede a lo deportivo. Insúa tiene un plantel corto, sin variantes en el banco como para cambiar la ecuación más allá que sobre el final pudo irse con algo más por el empuje y los remates que el arquero local le terminó tapando a Agustín Martegani, que reapareció tras el faltazo contra Tigre, y el Perrito Barrios, que fue el mejor de San Lorenzo en el partido.