Gastón Hernández habló tras el empate ante Gimnasia y fue claro: dijo que sería “una falta de respeto” pensar en otra cosa que no sea San Lorenzo. Pero mientras tanto, los rumores no frenan. Y ahora, más que rumores, lo que llegó fue un sondeo real desde Boca, que volvió a la carga con una propuesta informal para tantear el terreno.
En las últimas horas desde el entorno Xeneize se comunicaron de manera informal y pusieron sobre la mesa una cifra cercana a los 4 millones de dólares por el defensor. No fue una oferta formal, ni mucho menos definitiva, pero sí una forma de conocer su situación. Y en Boedo, con la economía incendiada, encendió las alarmas.
Una cifra lejana a la cláusula, pero cercana al problema
La cláusula de rescisión de Hernández está fijada en 10 millones de dólares, pero el contexto en San Lorenzo está lejos de permitir lujos. Con múltiples inhibiciones por levantar, sin refuerzos en lo que va del mercado, y con la amenaza concreta de un pedido de quiebra por parte de un Fondo Suizo, que exigiría el pago de 5 millones de dólares por un supuesto préstamo y la supuesta cesión de derechos de la transferencia de Adolfo Gaich al CSKA Moscú.
Desde la dirigencia saben que no pueden aceptar cualquier número, pero también saben que necesitan vender. Y por eso, aunque la cifra inicial de Boca esté lejos de lo que vale Hernández, el ofrecimiento podría marcar un punto de partida.
Otro pase a Boca y el alto costo político
Más allá de los números, hay un factor que pesa tanto o más que lo económico: el costo político. San Lorenzo ya vendió en este mercado de pases a Malcom Braida a Boca, y hacerlo ahora con otro titular, encima con la cinta de capitán, sería una bomba en el clima interno. Vender a Tonga, una de las figuras más queridas del plantel, podría agravar aún más la crisis dirigencial.
Hoy por hoy, no hay nada cerrado. Pero Russo lo conoce, lo dirigió y lo quiere. Y Boca volvió a la carga a días del cierre del mercado de pases (este jueves 24/7), San Lorenzo tiene urgencias económicas, y Gastón Hernández está en el centro de la escena.
