Con apenas 22 años, Tomás Silva se convirtió en una de las grandes revelaciones del sorprendente Platense campeón del Torneo Apertura. Este domingo, el Calamar venció 1-0 a Huracán en la final disputada en el Estadio Madre de Ciudades de Santiago del Estero y se quedó con el histórico título. Y en medio del festejo, un protagonista con pasado azulgrana vivió una consagración especial.
Silva no es un nombre más para San Lorenzo. Es un pibe que surgió de las Inferiores del club y que llegó a debutar en Primera allá por 2022, en una derrota por 4-3 ante Defensa y Justicia bajo el mando de Pedro Troglio. Luego, como les pasa a tantos chicos, no encontró continuidad (jugó 8 veces más tras) y luego de que Rubén Insua no lo tenga en los planes, bajó al Ascenso a buscar rodaje. En Atlanta encontró ese espacio para crecer, sumar minutos y volver a creer en sí mismo.
De Inferiores a campeón, con una semifinal cargada de emociones
Tras su buen paso por la Primera Nacional, Miguel Ángel Russo tampoco lo consideró y Platense se lo llevó a préstamo a comienzos de 2025. Y no tardó en hacerse un lugar en el equipo titular. Su rendimiento fue en ascenso y terminó siendo pieza clave en la campaña que terminó con el Calamar dando la vuelta olímpica: arrancó de suplente, pero a partir de la quinta fecha se ganó un lugar en el lateral izquierdo y terminó jugando los 15 partidos que cerraron el semestre.
Pero el camino al título tuvo un capítulo especial para él: en semifinales, Platense enfrentó y le ganó a San Lorenzo, el club que lo formó. Tomás había dicho en la previa que no sería un partido más, y así lo vivió. Luego vino la final ante Huracán, clásico rival del Ciclón, otro ingrediente emocional en una historia llena de simbolismo.
Su situación contractual y lo que viene
Aunque el pase sigue siendo de San Lorenzo, Silva tiene contrato vigente con Platense hasta diciembre de 2025. En ese acuerdo de principios de año, se incluyó una opción de compra baja: 400 mil dólares por el 50% de su ficha, lo que le da al Calamar, en caso que lo considere oportuno, comprarle la mitad del pase en un monto accesible.
Por lo pronto, Tomás disfruta de su mejor momento como profesional, con un título bajo el brazo y una carrera que vuelve a tomar vuelo. De promesa a campeón, en una historia de revancha, esfuerzo y superación.