“En el primer tiempo nos costó pese a que era un partido controlado de ambos lados. En el segundo tiempo, más allá de la derrota, fue mucho mejor”, arrancó el técnico en conferencia de prensa. Y siguió: “Lo más justo era un empate, pero es parte del fútbol. Nos preocupa, nos incomoda y no nos gusta no encadenar dos o tres resultados positivos”.
En relación a la línea de cinco futbolistas que ensayó en el Nuevo Gasómetro frente al Tiburón, dijo: “El otro día con Banfield nos fuimos muy conformes. Hoy no salió como lo esperábamos, sobre todo en la parte ofensiva. Desde lo defensivo estuvo bien, pero no lo pudimos plasmar en ataque. Nos costó el partido”.
Haciendo referencia a la búsqueda de ese once ideal que pregona desde hace algunas semanas, reconoció que “estamos más cerca de lo que queremos más allá de la derrota”. Después, agregó: “Es una cuestión anímica y de confianza porque en muchos aspectos se creció. Hay que seguir ajustando esos detalles por los que quizás terminamos perdiendo puntos“.
Más tarde, admitió que podría seguir rotando los arqueros: “Iremos viendo. Está muy bien Jose (Devecchi). El Mono (Monetti) también está respondiendo y sabemos lo que nos puede dar. Es un puesto en el que estamos tranquilos. Torrico dentro de quince días está apto para tenerlo en cuenta. Pasa por otro lado el inconveniente, no por el arco“.
Transitando los últimos puestos del Grupo A, con cinco puntos sobre 18 en juego, Dabove cerró: “Nos da bronca porque necesitábamos ganar para acercarnos en el lote de los de arriba. Veníamos en un crecimiento y un progreso como equipo que, de ganar, nos iba a seguir generando confianza. El enfoque en la Copa Argentina y en la Copa Libertadores es importante, pero hoy nos vamos con una sensación amarga”.