Sin dudas fue uno de los problemas que se reiteró en los últimos tiempos. Y como consecuencia trajo pérdidas patrimoniales para San Lorenzo. La demora en la renovación de los contratos de jugadores derivó en que muchos se terminen yendo con el pase libre. Otros, como el caso de Gattoni, debieron ser vendidos a las apuradas y dejaron muy poco dinero en la caja azulgrana.
A fin de año se vencen los vínculos de 11 futbolistas. En ese grupo, incluso, hay varias piezas clave en el once titular de Rubén Darío Insúa, que de ninguna manera piensa en que le sigan desmantelando el plantel. Aunque todavía no hay ninguna certeza de que los dirigentes vuelvan a incurrir en los errores cometidos sucesivamente en los años pasados.
Los jugadores que están en esa situación son Augusto Batalla, Facundo Altamirano, Gastón Campi, Jalil Elías, Gonzalo Maroni, Carlos Sánchez, Nicolás Blandi y Ezequiel Cerutti. También hay futbolistas que habitualmente juegan en Reserva, como el caso de Lautaro López Kaleniuk y Agustín Hausch. Y uno que directamente está relegado: Mariano Peralta Bauer.
De ellos, Batalla podría dejar el club por estos días si River ejecuta la cláusula de repesca, la cual finaliza el 31 de agosto, y el CASLA no iguala la oferta que llegaría del exterior. Si no la hace efectiva, a fin de año habrá que ver en cuánto lo tasa el Millonario al arquero. Altamirano llegó a préstamo de Banfield y tiene una opción de compra de 1.4 millones de dólares.
Elías tuvo algunas propuestas del exterior que en Boedo consideraron insuficientes. Por el volante la CD está negociando desde hace un tiempo y no hay acuerdo. Maroni es otro de los que está cedido (de Boca) y dependiendo de su rendimiento, hoy la idea es ver qué posibilidades hay que se quede. La Roca seguiría. ¿El motivo? Firmó con una opción un renovar por otro un año más si es que al menos juega el 70% de los partidos del 2023.
Por Blandi, que prácticamente no juega en San Lorenzo, de momento no hay charlas por una posible continuidad. Lo mismo pasa con Cerutti, aunque el de Pocho es un caso particular: como la recuperación de su lesión (rotura de ligamentos cruzados) iría más allá del 31/12, legalmente, la institución debería renovarle automáticamente.
López Kaleniuk tuvo algunos sondeos de Sarmiento pero nada formal. Habrá que ver qué pasa con el tercer arquero, que ya tuvo un préstamo en el FADEP. Por Hausch desde hace meses que se dice extraoficialmente que el contrato está arreglado. Sin embargo, la firma nunca llegó. Peralta Bauer no es tenido en cuenta por el DT y se entrena a la espera de resolver su salida.
Todos estos futbolistas, a excepción de los que llegaron a préstamo, ya están en condiciones de negociar un precontrato con cualquier otra institución para luego marcharse con el pase en su poder a fin de año. Si la idea es defender el patrimonio, los encargados del fútbol en San Lorenzo ya están tardando demasiado…