Llegó con perfil bajo, pero en poco tiempo se ganó un lugar. Con solidez, sacrificio y una regularidad que escaseaba en ese momento del equipo, Nicolás Tripichio se convirtió en una grata sorpresa apenas aterrizó en San Lorenzo. Un año después, sigue en el club y, aunque el recorrido tuvo vaivenes, su figura volvió a tomar fuerza justo cuando más se necesitaba.
Este viernes, él mismo se encargó de recordarlo en sus redes sociales: cumplió su primer aniversario en Boedo. “1 año juntos, Cuervos. Gracias por el cariño desde el día uno, lo sentí y lo siento desde que llegué a este gran club. Vamos por más, todos juntos”, escribió el volante, junto a varias fotos en los que repasa sus momentos en el club y que refleja el vínculo que construyó con el hincha.
El andar de Tripichio en San Lorenzo
Tripichio tuvo un muy buen arranque con la camiseta del Ciclón, pero su proyección se vio interrumpida en septiembre pasado, cuando sufrió una fractura de clavícula en un partido frente a Vélez. Esa lesión lo marginó de las canchas por varios meses y, aunque volvió a inicios de 2025 ya con Miguel Ángel Russo como DT, le costó volver a encontrar la intensidad de sus primeros partidos.
Aun así, Russo le dio confianza: fue titular en prácticamente todos los encuentros del primer semestre, incluso cuando su nivel todavía no terminaba de despegar. En silencio, sin generar ruido, siguió sumando desde el vestuario y se fue consolidando como uno de los referentes del grupo, especialmente para los juveniles.
El último viernes, ya con Damián Ayude al mando, tuvo su mejor partido en mucho tiempo contra Talleres de Córdoba. Con un nivel más que destacado, Tripichio volvió a ser el que San Lorenzo había disfrutado en su llegada. Y el hincha, que no olvida, se ilusiona otra vez con ese jugador que empezaría a haber dejado atrás la mala racha.