En medio de un cierre de año turbulento, con el plantel sin entrenarse por segundo día consecutivo y una crisis institucional cada vez más profunda, San Lorenzo finalmente consiguió los fondos para pagar la deuda con los jugadores.
No fue de la manera ideal, pero el dinero apareció. Ante la urgencia por abonar los premios adeudados, que habían sido prometidos antes del partido ante Central Córdoba en Santiago del Estero, volvió a surgir un actor clave en el salvataje económico del club.
Se trata de Atomik, la empresa que viste al equipo azulgrana, que adelantó 120 millones de pesos en concepto de regalías para que el club pueda cumplir con el plantel profesional.
No es la primera vez que salva a San Lorenzo
Este nuevo auxilio no es un hecho aislado. Es la tercera vez en el año que la marca adelanta fondos para descomprimir situaciones límite:
- Abril: cuando los futbolistas realizaron un paro antes del cruce de cuartos de final del Torneo Apertura ante Argentinos Juniors.
- Mediados de octubre: para resolver deudas salariales e intimaciones vinculadas a Jhohan Romaña y Alexis Cuello.
- Diciembre: ahora, para destrabar el conflicto actual por los premios impagos.
Una solución inmediata, un problema a futuro
Si bien este adelanto permite descomprimir la tensión con los jugadores, el problema de fondo sigue vigente: San Lorenzo deberá devolver ese dinero.
Según informó el periodista Leandro Alves, el saldo actual con la empresa de indumentaria rondaría los 720 millones de pesos negativos, y la deuda se proyecta saldar recién durante el primer trimestre de 2026.
Atomik le adelantó a #SanLorenzo alrededor de $120 millones en concepto de regalías para poder cumplir con los premios que se le deben al plantel. Hoy el saldo del club con la empresa es aproximadamente -$720 MM, creen que quedarán en cero en el primer trimestre 2026 pic.twitter.com/9pQWbaeE4h
— Leandro Alves (@lea_alves) December 2, 2025
De esta manera, el club logra apagar un incendio inmediato, pero suma otra pesada mochila económica a una situación financiera que sigue siendo crítica.
Por ahora, la prioridad es que los jugadores cobren y se normalice la actividad. Lo que queda claro es que San Lorenzo sigue sobreviviendo con parches, mientras el desorden institucional continúa sin resolverse.
