Enorme victoria de San Lorenzo. Venía siendo parejo el partido y parecía que el punto le sentaba bien al equipo de Miguel Ángel Russo. Pero hay una frase tan hecha como verídica: esto es fútbol. Y pasó una vez más en La Plata. El Ciclón le ganó 2-0 a Gimnasia por un gol en su primera llegada clara del complemento y lo terminó liquidando en la segunda. Así, seis de seis para Boedo en el arranque del Torneo Apertura.
El Ciclón fue de menor a mayor en el primer tiempo. El dueño de casa se mostró con mayor decisión de arranque, merodeó el área azulgrana pero salvo un remate de Briasco que dio en el travesaño tras un anticipo a Romaña, tuvo poco ingenio para llegar con peligro al área de Gill. Antes y después de salvarse, el arquero paraguayo dio seguridad siempre y fue atajando todo lo que tuvo a su alcance.
San Lorenzo también pudo lastimar. De hecho, tuvo en los pies de Cuello su mejor chance: el delantero encontró un revoleo de un defensor del Lobo, ganó con el cuerpo y falló en la definición porque Ingolotti achicó rápido. Después intentó Cerutti desde afuera del área con un buen disparo cruzado y en la última de la primera mitad, un cabezazo de Pitu Herrera pasó cerca luego de ganar bien en las alturas a su marcador.
En el complemento, Russo sacó a Cuello y le dio lugar a Vombergar, el héroe del triunfo ante Talleres. Sin embargo, el desarrollo del partido fue malo. Más allá de la intensidad con la que intentaron jugar, el Ciclón y Gimnasia se repartieron la pelota, se atacaron hasta tres cuartos de cancha y ni siquiera intentaron patear al arco. Era muy cortado el juego. Hasta que llegó, claro, la jugada impensada.
A falta de 15 minutos para terminar, a La Bomba le quedó una y la mandó a guardar. Elías Báez envió un tremendo centro y en el borde del área chica, el centrodelantero cabeceó para hacer estéril la volada de Ingolotti. Gol y locura en el banco azulgrana. Y ni que hablar 9′ más tarde, cuando en la desesperación de Gimnasia, Cecchini, que había ingresado minutos antes por Irala, encontró un rebote en el borde del área y marcó el segundo.
