De poco les servirá a los hinchas de San Lorenzo intentar conformarse con igualar un clásico. Mereció algo más que Independiente, otro equipo que venía maltrecho de los últimos partidos. Pero, claro, ese premio sería demasiado para un equipo que pena por no salir último en el torneo. Fue empate 1-1 en Avellaneda. Y punto.
El primer tiempo fue parejo. Se repartieron el dominio de la pelota, pero Independiente, con muy poco, fue más profundo en sus ataques. Un remate desde lejos de Lucas Romero que despejó Torrico, una buena individual de Domingo Blanco y otra de Silvio Romero fue lo mejor del local.
El Ciclón siguió en la misma línea de siempre. El juego no fluyó, se volvieron a cometer algunos errores sin sentido y en esos primeros 45 minutos, apenas un tacazo de Di Santo dentro del área, tras un centro de Rojas, fue lo más claro del equipo de Monarriz. Y si encima Trucco le perdona la vida a Alan Soñora por una patada de roja a Uvita Fernández, todo se hace cuesta arriba.
No necesitó hacer demasiado el Rojo para vulnerar a este pobre San Lorenzo en el complemento. Silvio Romero lo puso adelante en la chapa al minuto de juego. Ayudado por una floja respuesta defensiva azulgrana, el delantero empujó como pudo en el segundo palo y puso al equipo de Falcioni por delante.
La reacción llegó a cuentagotas. Si bien se adelantó en el campo, San Lorenzo no resolvió bien con el balón. Excepto un zurdazo que Sosa le tapó abajo a Uvita Fernández, en tres cuartos todo se le derrumbaba. Llegando a los 26, un centro de Fernández Mercau le dio en la mano a Zurita dentro del área y Ortigoza cambió penal por gol.
En la siguiente jugada, el arquero del Rojo volvió a aparecer para sacarle un remate a Di Santo que pedía gol pero después, en la continuación de la jugada, tuvo que aparecer Torrico para salvar a San Lorenzo. Francisco Flores lo agarró de la camiseta a Lucas González dentro del área, le cometió un penal infantil y, encima, se terminó yendo expulsado por doble amonestación. Pero el Cóndor voló para taparle el disparo a Silvio Romero.
