Rubén Insúa evaluaba rotar piezas, pero sorprendió en la previa, metió lo mejor en la cancha y mejor no le podía haber salido: San Lorenzo le ganó 3-1 a Atlético Tucumán y volvió al triunfo en la Liga Profesional para tratar de meterle presión a River, al que lo tiene a un punto y juega este domingo con Huracán. Tras la victoria, el DT dejó sus sensaciones y explicó por qué cambió sobre la marcha…
“Jugamos el martes a la noche y tuvimos un viaje largo de 15 horas. Apenas llegamos a Buenos Aires fuimos a entrenar porque el profe consideraba que eso iba a acelerar la recuperación. Vimos que el equipo el jueves estaba un poco mejor. Después del entrenamiento de ayer me reuní con el profe y el departamento médico, y me dijeron que estaban bien”, comentó el Gallego en ESPN.
Y luego, añadió: “Sabíamos que íbamos a tener un rival difícil y que ganar acá los tres puntos contra Atlético no es sencillo. Como estaban en plenitud, decidimos jugar con el mejor equipo posible y así lo seguiremos haciendo. Cuando no estén recuperados jugarán otros once, que lo hubiesen hecho hoy si el equipo no se hubiese recuperado físicamente”.
Pensando en el desgaste, también fue consultado cómo va a encarar el próximo partido de San Lorenzo, que es en apenas cuatro días nada menos que contra Boca: “Ahora tenemos un tiempo para recuperarnos, igual que el rival. Esperemos preparar bien el partido, llegar al cien por cien como corresponde para esta clase de compromisos”.
Para cerrar, hizo referencia al choque con el Decano: “Mientras el partido estaba once contra once, el equipo estaba haciendo un gran partido. Habíamos sacado una diferencia de dos goles, y estaba lúcido, suelto, ordenado… Después, con el tema de las expulsiones, se frenó el juego y creo que eso nos hizo perder cierto orden y precisión. Lo corregimos en el entretiempo y después del tercer gol creo que terminamos el partido”.