En medio del caos institucional, Marcelo Moretti volvió a asegurar que San Lorenzo ya pagó los sueldos de agosto a todo el plantel, al cuerpo técnico y solucionó la intimación de Jhohan Romaña. Sin embargo, la versión puertas adentro del vestuario es muy distinta.
De dónde salió la plata
Obviamente el dinero que permitió saldar parte de las deudas no salió del bolsillo del presidente, sino de Atomik, la marca de indumentaria que viste al equipo azulgrana.
La empresa, que llegó al club a comienzos de año mediante un contrato gestionado por el entonces secretario de Marketing Luis Brito (hoy desligado del club y ocupando el mismo puesto en la marca), adelantó 250 millones de pesos en concepto de regalías. Con ese dinero, San Lorenzo logró cumplir parcialmente con el plantel.
No es la primera vez que Atomik “salva” una situación límite. En abril, cuando los futbolistas realizaron un paro antes del duelo de cuartos de final del Torneo Apertura ante Argentinos Juniors, la marca también había adelantado fondos para descomprimir la crisis.
La desmentida al presidente
Ahora bien, mientras Moretti asegura que “ya pagamos agosto completo a todos los jugadores y cuerpo técnico” y que “se canceló la intimación de Romaña”, puertas adentro lo desmienten: aseguran que a nueve futbolistas aún se les debe parte de julio, que los pagos de agosto fueron parciales y sólo a quienes menos ganan, y que la deuda con Romaña fue reducida, no cancelada.
Así, Atomik volvió a ser el salvavidas económico de un club que sigue sin paz, mientras los jugadores esperan que se cumplan las promesas y el conflicto no vuelva a escalar en las próximas semanas.
