Aprobar el clásico contra Huracán significaría acomodarse en la Copa de la Liga. Por el contrario, una nota baja sería un golpe anímico durísimo. Por eso, esta semana de estudio tiene una importancia trascendental y a la hora del armado del 11 de San Lorenzo, Rubén Insua deberá despejar varias X que tiene como incógnitas.
De atrás para adelante, como le gusta armar los equipos al Gallego, habrá un futbolista importante que seguiría sin poder reaparecer este sábado: Gastón Campi. El defensor de 33 años todavía no se recuperó de la distensión en el sóleo que lo dejó afuera de los partidos con Racing y Tigre. Hoy se unió al grupo de manera progresiva y, en el mejor de los casos, llegaría al encuentro con apenas una práctica con normalidad encima, lejos de estar al 100%.
Las únicas piezas que no se mueven del fondo son Rafa Pérez y Gastón Hernández, por eso, prácticamente descartado Campi, el Gallego se deberá inclinar por la presencia de Gonzalo Luján o de Carlos Sánchez. El juvenil fue titular en Victoria jugando como líbero, pero el técnico decidió moverlo al lateral derecho por Agustín Giay en el complemento para darle lugar a La Roca, que no desentonó en los últimos 45 minutos.
Eso sí, tampoco hay que descartar que en caso que Luján gane esa pulseada, el colombiano se sume a la mitad de la cancha como acompañante de Jalil Elías, sobre todo después del desempeño en esa posición de Nahuel Barrios, mermado desde lo físico, durante el primer tiempo con Tigre. Eso sí, el Perrito no saldrá del equipo porque, en principio, la idea es que vuelva a su posición original en el extremo izquierdo del ataque.
El centrodelantero, no hay dudas, seguirá siendo Adam Bareiro. Pero lo que hasta ahora sigue en veremos es quién jugará en el costado derecho. ¿Las opciones? La continuidad de Federico Girotti, que en ese puesto apenas pudo rendir en la Copa Argentina y luego le costó, o la vuelta al equipo de Iván Leguizamón.