Las enormes complicaciones económicas que viene arrastrando San Lorenzo hicieron que el armado del plantel quede condicionado al ajuste que, ahora sí, pretenden llevar adelante sus dirigentes. Y si encima el equipo queda diezmado por suspensiones, lesiones y una ola de contagios de gripe, no queda otra que tirar de los juveniles más allá de un contexto que no ayuda.
Troglio se inclinó porque tres pibes hagan su debut oficial con la camiseta azulgrana ante Defensa y Justicia. El que jugó de arranque fue Iván Leguizamón. El volante había mostrado condiciones en el verano frente a Estudiantes en Uruguay, donde incluso marcó un gol, pero a pesar de sus ganas poco pudo hacer en unos primeros 45 minutos muy desfavorables para el equipo. El DT lo reemplazó en el entretiempo por Martegani.
En ese primer tiempo, también hizo su estreno absoluto Tomás Silva, que debió entrar por la dura lesión que sufrió Gonzalo Luján. El lateral izquierdo de 18 años entró con un 2-0 abajo y no la pasó bien: sufrió con los extremos del Halcón, sobre todo con Francisco Pizzini, y en ataque tampoco pudo aportar demasiado.
El tercer juvenil que debutó fue Jeremías James. El marcador central de 21 años ingresó en el arranque del segundo tiempo por Peruzzi y compartió zaga con Cristian Zapata. No se mostró seguro en la marca pero sí aportó en ataque: bajó la pelota que terminó en el tercer descuento del Ciclón y le dio el pase a Centurión que Unsain terminó tapando sobre la hora.
