Los hermanos Romero ya están en Argentina, como estaba previsto. Llegaron en la madrugada de ayer después de disputar la Copa América y pasar varios días de vacaciones junto a su familia en Paraguay. Todo esto, claro, con absoluto acuerdo con los dirigentes del club y el técnico Paolo Montero.
Descartados para el debut de San Lorenzo contra Arsenal, el domingo en Sarandí, Angel y Oscar ahora están cumpliendo con el aislamiento obligatorio de siete días, que comenzó este viernes cuando arribaron al país. Una vez que se reincorporen a los entrenamientos la próxima semana, tendrán una cumbre con el DT para ver si los puede utilizar con Central Córdoba.
Ahora bien, sus presencias en el sábado 24 ante el elenco santiagueño, al menos desde el arranque, parece compleja. Los Romero se sumarían al plantel entre 24 y 48 horas antes de la presentación en el Nuevo Gasómetro y todo indica que le llegarían en mejores condiciones al clásico contra Boca del martes 27, ya por la tercera fecha del campeonato.
Mientras Montero deberá ingeniárselas para afrontar el choque con Arsenal (y posiblemente con Central Córdoba) sin dos de sus jugadores más importantes, lo cierto es que todavía sigue dando vueltas una posible oferta que llegaría desde la MLS por los mellizos. Y ante la urgencia que San Lorenzo de vender, nadie asegura que sus futuros continúen en Boedo…