A mediados del 2022, San Lorenzo dejó salir a varios jugadores a préstamo para que puedan sumar minutos y experiencia en otros equipos. Uno de los que se fue en busca de mayor rodaje fue Matías Sosa, defensor central que no tenía lugar en la Primera y en ese momento se estaba desempeñando como capitán en la Reserva.
Pero si bien su contrato con Nueva Chicago, club al que fue cedido, finalizaba en diciembre de este año, lo cierto es que el oriundo de Rosario volvió antes de tiempo a Boedo y ya está trabajando bajo las órdenes del Pipi Romagnoli. De hecho, este sábado por la mañana participó de uno de los amistosos contra Atlas en la Ciudad Deportiva.
Según informó el equipo de la Primera Nacional, el zaguero de 22 años firmó la rescisión del vínculo “de mutuo acuerdo” después de seis meses donde no encontró regularidad. Arrancó alternando, luego jugó algunos partidos de titular, pero antes que finalice el año perdió muchísimo terreno y no volvió sumar más de los 500 minutos que acumuló en ocho encuentros.
Con contrato hasta diciembre de 2023, habrá que ver si el objetivo del defensor será volver salir a préstamo o si Rubén Insúa lo evaluará para tenerlo como alternativa en Primera. Por lo pronto, mientras el plantel profesional continúa la pretemporada en Uruguay, seguramente comenzará a entrenarse con Reserva a la espera de que se resuelva su futuro.