Después del caos que se vivió este lunes en la sede de Avenida La Plata, donde Marcelo Moretti huyó en medio de insultos y represión policial, el dirigente decidió mantenerse firme en su cargo. Pese al repudio de los hinchas y el clima institucional cada vez más tenso, el presidente no tiene intención de dar un paso al costado.
Pese al repudio generalizado y a la represión que se desató frente a la sede del club en Boedo, Moretti mantiene su decisión de continuar al frente de la institución. Luego de haber recuperado su cargo a través de una medida judicial, el dirigente ratificó ante distintos medios partidarios que seguirá ejerciendo la presidencia.
Su aparición se dio al primer día hábil después de que se levantara la inhabilitación judicial tras el pago de la fianza correspondiente en la causa que se le sigue por coimas y corrupción, a partir del video en el que se lo ve recibiendo dinero para incorporar a un juvenil. La noticia de su regreso generó un fuerte malestar entre los socios, que se autoconvocaron en la puerta de la sede para exigir su salida y la convocatoria inmediata a elecciones.
Mientras tanto, en el resto de la Comisión Directiva reina el silencio absoluto. Incluso aquellos que habían presentado su renuncia en la reunión que decretó la acefalía, y que Moretti logró revertir judicialmente, continúan formalmente en sus cargos, pero sin pronunciarse públicamente.
