La historia de Iker Muniain en San Lorenzo ya tiene un final definido. El mediocampista español, que había pedido unos días más para definir su situación, finalmente decidió ejecutar la cláusula de salida y no continuará en el club. Su ciclo en Boedo, breve pero intenso, se cierra en medio de un contexto complejo tanto en lo personal como en lo institucional.
Ahora bien, antes de regresar definitivamente a España, Muniain volverá a la Argentina para despedirse de forma pública. Porque este viernes a las 12.30 en la sala de prensa del Pedro Bidegain, el futbolista brindará una conferencia de prensa para explicar los motivos de su salida, repasar su paso por el Ciclón y agradecer el cariño que recibió desde su llegada.
Más allá de que las razones ya están bastante claros —la necesidad de reencontrarse con sus hijos, la inestabilidad del proyecto deportivo, un contrato alto difícil de sostener—, será la primera vez que se escuche de su propia voz por qué decidió cortar el vínculo antes de tiempo. Su palabra generará repercusión y marcará el cierre formal de su etapa en Boedo.
Desde el club valoran el gesto. Si bien su partida representa una baja sensible, Muniain eligió despedirse con respeto, en persona y de cara a los hinchas. Un gesto que, en un fútbol repleto de salidas abruptas y silenciosas, no es menor. Una página que se cierra con la palabra de su protagonista.