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Los pibes volvieron a dar la cara y se llevaron un triunfazo de Rosario

Con goles de Martegani y Gattoni, un San Lorenzo repleto de juveniles le ganó 2-1 a Newell’s y toma algo aire de cara al final del campeonato.

Berón entendió que la mejor manera de encarar el duelo en Rosario era a través del esquema que le dio resultados contra Unión y volvió al 5-3-2. ¿El plan? El mismo que en Santa Fe. El Ciclón cedió la tenencia y esperó para poder sacar una contra con Uvita Fernández y Ezequiel Cerutti como punta de lanza.

Esa idea funcionó sobre todo después de la apertura del marcador, que luego de un cabezazo de Nazareno Fúnez que pasó cerca del ángulo de Torrico. Tras el saque de arco, Uvita Fernández falló un mano a mano con Arboleda y luego que Ditta la haya salvado en la línea, Giay la volvió a mandar adentro para que Martegani empuje sin marca alguna en el segundo palo.

Desde ese momento, La Lepra intentó empujar con pocas ideas, aprovechando los costados con Vangioni y Méndez, pero con centros que jamás pudieron vulnerar la última línea del Ciclón. Federico Gattoni, Gastón Hernández y Jeremías James sacaron todo de arriba. La última fue también para Boedo, con una contra muy mal resuelta entre Martegani, Uvita y Cerutti.

En el complemento, Newell’s salió con la misma decisión, pero con los mismos problemas en el ataque. Y San Lorenzo, cuando no pasaba nada, lo aprovechó. Error de González en la salida, no llegó Castro pero sí Gattoni, que se había quedado merodeando el área después de un córner y la clavó al ángulo, bien lejos de Arboleda.

Después del segundo grito azulgrana llegaron los mejores minutos del local. Siguió con la misma fórmula, pero fue más punzante por Lema, que primero le erró al arco de palomita pero después conectó arriba y, a instancias del VAR por un posible fuera de juego de Giani, los rosarinos pudieron descontar.

Para sostener el resultado, Berón se protegió con algunos cambios: ingresaron Ezequiel Herrera Francisco Perruzzi e Iván Leguizamón por Agustín Giay, Agustín Martegani y Uvita Fernández. Más tarde lo hicieron Siro Rosané y Nicolás Blandi en lugar de Yeison Gordillo y Pocho Cerutti. Así, los de Sanguinetti, a puro centro, no pudieron penetrar la firmeza de los pibes y los minutos se fueron consumiendo sin jugadas de peligro para el arco de Torrrico.