El viernes se cerró el acuerdo. Ese mismo día, los dirigentes de San Lorenzo y de Talleres de Córdoba se estrecharon la mano por la compra del pase de Rafael Pérez en 700 mil dólares. Sin embargo, pasaron las horas y el anuncio oficial del marcador central se sigue demorando. Incluso, a esta altura no hay todavía señales de presentación. ¿Qué pasó?
La idea de San Lorenzo era que este martes por la mañana se realice la revisión médica para luego firmar el contrato que lo uniría al club por dos temporadas y partir rumbo a Uruguay para sumarse a los trabajos de pretemporada del plantel de Insúa. Pero nada de eso ocurrió. De hecho ni siquiera volvió de Colombia, donde permanece luego de que se caiga su transferencia con Junior de Barranquilla.
Por lo pronto, la demora no tendría que ver con Pérez, sino con su representante por un tema de comisiones. Lo que dicen en Boedo es que no habría problemas con lo económico pero sí surgieron algunas diferencias en cuanto al modo y la forma de pago que habrá que volver a ajustar para que, finalmente, se destrabe definitivamente el pase del colombiano.
La cuestión es que, por ahora, el más perjudicado es el Gallego, que este martes lo esperaba en el segundo turno de entrenamientos o a más tardar a la noche en la concentración. “Por suerte se acaba de cerrar con Rafa Pérez que siempre nos gustó, reúne características parecidas a las de Zapata y conoce el fútbol argentino“, comentó el DT en diálogo con ESPN hace algunas horas.
En San Lorenzo creen que estas diferencias quedarán solucionadas y que la operación no llegará a correr peligro. Según dicen, ahora esperan que Pérez pise territorio nacional en las primeras horas del miércoles para pasar por los chequeos médicos, firme y viaje a Montevideo estar a disposición de Insúa. ¿Será?