San Lorenzo todavía está inhibido. A diferencia de lo que se decía en el club, la FIFA confirmó en su plataforma que todavía quedan dos deudas por saldar y hasta que eso no suceda, los refuerzos no podrán ser habilitados. En ese sentido, Leandro Romagnoli ya conoce el riesgo de no tener a los nuevos para jugar frente a Independiente.
“Hasta ahora todavía no impactó. Faltan todavía uno o dos pagos y que San Lorenzo reciba el OK. Después de eso ya estaría, pero hasta ahora no“, comentó el entrenador del Ciclón en diálogo con Universo Azulgrana, consciente que podría jugar su cuarto partido consecutivo con el mismo plantel.
“Los estamos esperando desde el primer partido con Huracán. Se está demorando un poco de más. No sé por qué no lo hacen más dinámico si San Lorenzo ya pagó. Nos harían bien contar con ellos porque tendremos más recambio y vamos a mejorar con la competencia interna“, agregó después, a la espera de las habilitaciones.
Cuando le consultaron por la posible incorporación de Francisco Fydriszewski, quien se estaría sumando por estas horas, comentó: “Es un delantero que miramos bien, que sentimos que nos puede dar muchísimo en ataque y variantes. Tiene una buena trayectoria y nos puede servir”. Y destacó, cuando le consultaron por Facundo Bruera: “Los jugadores que vienen llegan consensuados con el cuerpo técnico“.
“Los puestos que se nos habían ido con Agustín (Giay) y Adam (Bareiro) o potenciar la banda, que lo hicimos con Matías (Reali), son los que más necesitábamos”, avisó Romagnoli. Y agregó que si bien el ataque estaría cubierto, ahora “estamos viendo algún volante tipo 8, un motorcito… o un defensor, puede ser un central zurdo o un lateral izquierdo“.
Por último, hizo referencia a la interna política del día a día en el club: “No está nada bueno. Uno que es hincha siempre quiere que San Lorenzo esté bien en lo deportivo y en lo económico. Son cosas que pasan. A veces hay que dejar la política de lado, apoyar todos juntos, que el club se ordene y pueda salir adelante“.
