La esperanza es lo último que se pierde, dicen. Por eso, Leandro Romagnoli tiene decidido convocar a los refuerzos para el clásico del sábado contra Huracán: Nicolás Tripichio, Matías Reali y Andrés Vombergar, que aún no firmó su contrato, formarán parte de la nómina a la espera de que San Lorenzo levante las inhibiciones y puedan jugar.
Por tiempos, ya es prácticamente imposible que los jugadores queden habilitados. La dirigencia trató de cancelar las deudas pero cerró el jueves sin poder hacer el pago de los 2.800.000 dólares que tiene que repartir entre Xolos de Tijuana, Monterrey de México, Ferencvaros de Turquía, Independiente Santa Fe y Torito Rodríguez.
¿Y qué pasa si el viernes paga? Ahí dependerá de una cadena de situaciones que ya no dependen de San Lorenzo. Primero los clubes y el jugador al que le deben tienen que comunicarle a la FIFA que los montos ya están saldados y luego la FIFA avisarle a la AFA que el CASLA ya puede registrar nuevos contratos. Todo muy pero muy sobre la hora…
Consciente de todo esto, el entrenador ya probó en dos entrenamientos consecutivos un mismo equipo que se perfila para jugar contra el Globo: Altamirano; Arias, Romaña, Campi, Braida; Remedi, Irala; Cuello, Barrios, Leguizamón; y Tarragona. Si hay luz verde, Tripichio sería el único jugador que podría ir de arranque en lugar de Arias.
¿Se podrá solucionar en 24 horas todo esto que ya se sabía desde hace meses? Pipi se aferra al milagro…