En medio del caos institucional, los comunicados cruzados, la marcha atrás del plantel ante presuntas presiones de altos mandos del fútbol argentino y la interminable lista de deudas, San Lorenzo suma un nuevo problema que podría explotar en breve: Jhohan Romaña intimó formalmente al club y podría quedar en libertad de acción si no le pagan lo que le deben en las próximas 48 horas.
La información fue revelada por el periodista Leandro Alves (La Cicloneta), quien explicó que el defensor colombiano presentó una nueva intimación para cobrar el salario de octubre. De no percibirlo dentro del plazo legal, quedará habilitado para solicitar la libertad de acción, lo que implicaría que el Ciclón pierda un titular más en plena crisis deportiva y sin posibilidad de reemplazarlo por las inhibiciones vigentes.
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Este no es el primer reclamo del futbolista: ya había intimado al club el mes pasado, exigiendo el pago de sueldos adeudados y primas, pero aquella presentación no se había realizado a través de Futbolistas Agremiados, por lo que no podía avanzar hacia la ruptura del vínculo. En esta ocasión, la intimación sí habría ingresado al gremio, lo que habilita la chance concreta de que Romaña quede libre.
La relación entre el defensor y la dirigencia viene desgastada hace tiempo. Días atrás, tras el partido frente a Atlético Tucumán, Romaña había criticado públicamente la falta de acompañamiento institucional: “Siempre estamos solos”, dijo ante la consulta sobre la ausencia dirigencial en la delegación, marcando la distancia entre el plantel y la conducción del club.
Con el panorama económico desbordado, 14 inhibiciones activas y un clima interno cada vez más tenso, San Lorenzo podría perder a un jugador clave simplemente por no pagarle el sueldo. Las próximas horas serán decisivas.
