La derrota contra Huracán profundizó la crisis futbolística, desató una vez más la bronca de los hinchas y ahora San Lorenzo intentará cortar la racha de cuatro derrotas al hilo ante Godoy Cruz. Para eso, este miércoles el plantel continuó con los entrenamientos y Monarriz tuvo dos novedades, una buena y una mala. ¿Por cuál empezamos?
Por la buena, claro. Ezequiel Cerutti, titular en el ciclo Montero, volvió esta mañana a completar todos los ejercicios con normalidad por primera vez desde que se resintió del desgarro en la pierna derecha. Igualmente su participación para el choque con el Tomba no está asegurada. Al igual que Gabriel Rojas, que desde ayer se entrena con el grupo tras superar el mismo problema muscular, será evaluado para ver si puede estar.
La otra novedad, la que deja un mal sabor de boca, es que más allá de estos posibles regresos el que ahora sufrió el karma de los desgarros es Gonzalo Luján, el juvenil está haciendo sus primeras armas en Primera y suele aparecer como alternativa en defensa ante tanta ausencia. De esta manera, no estará disponible entre dos y tres semanas.
Si bien son de las lesiones más leves que puede sufrir un futbolista, los desgarros en San Lorenzo se vienen repitiendo desde el arranque del campeonato. Franco Di Santo faltó en reiteradas ocasiones por este tipo de problemas y lo mismo pasa con Alejandro Donatti, que todavía no logra recuperarse de esta lesión que sufrió hace quince días.
Al posible faltazo del Flaco, se le podría sumar Gino Peruzzi. El lateral derecho padece una contractura en las paravertebrales dorsales que lo sacó del clásico con el Globo y desde el inicio de la semana de trabajo está realizando ejercicios en el área de kinesiología.