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Con polémica, San Lorenzo empató con Boca y se complica

Casi que no estuvo San Lorenzo en el primer tiempo. Esa línea de tres que dice tener Insua muchas veces fue de cinco o de siete hombres, con los 11 futbolistas detrás de la pelota y corriendo de un lado al otro tratando de recuperar la pelota, algo que nunca se le dio. En ese contexto, le costó llegar al arco de Romero salvo por algunas guapeadas de Barrios o algunos centros sin destino, sobre todo en el cierre de esa etapa.

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El dominio fue de la visita. Y las situaciones también. Con Advíncula atacando de un lado y el Colo Barco. Del lado izquierdo el Xeneize tuvo la primera, cuando un centro que se desvió Giay hizo una parábola y la pelota dio en el travesaño. Después Cavani quedó mano a mano y, cuándo no, apareció Batalla para taparle con los pies el remate del uruguayo. Y lo último, lo más claro, fue en una carambola luego de un cabezazo de Figal que terminó dando en el palo.

En el complemento Insua movió fichas. Sacó a Maroni y Leguizamón y entraron Braida y Girotti. El delantero entró para jugar de doble nueve con Bareiro. Pero cuando parecía que el CASLA arrancaba mejor, llegó el gol visitante. La polémica fue porque hay una falta de Pol Fernández a Barrios, Echavarría dejó seguir y Girotti regala una pelota increíble en la segunda jugada. De ahí nace la contra de Barco y la definición de Merentiel para el 1-0.

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Los del Gallego recién empezaron a mostrar algo después del cachetazo cuando, jugado por jugado, tiró la carne al asador. Metió a Hausch primero por Giay. Después a Blandi por Carlos Sánchez. Así llegaron las mejores ocasiones. La tuvo Girotti con un cabezazo que dio en el travesaño después que Braida haga estirar a Romero y el empate llegó por un error del arquero de Boca, que calculó mal un centro de Barrios y Bareiro, que le ganó la espalda a Valentini, la empujó con el arco vacío.

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Con el empate el trámite se hizo más parejo. Boca intentó volver a buscar, pero San Lorenzo, con el ímpetu que alguna vez lo caracterizó, fue adelante como pudo. Y llegó la gran polémica de la noche: Saracchi rechazó mal, la pelota le quedó a Barrios, enganchó ante Campuzano y la clavó en el ángulo. Golazo para dar vuelta el clásico… pero no. En medio de la locura, Baliño llamó a Echavarría y lo terminó anulando por un imperceptible offside de Girotti en el arranque de la jugada, después del saque de arco de Batalla. Y no quedó tiempo para más…

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