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San Lorenzo se levantó con un muy buen partido contra Platense

El Ciclón jugó uno de sus mejores partidos del torneo y le ganó con autoridad al Calamar con goles de Hernández y Cerutti, de penal. Fue 2-0 en el Nuevo Gasómetro, que despidió al equipo con una ovación.

San Lorenzo lo jugó con el alma. A diferencia del partido con Patronato, donde mostró dos caras totalmente opuestas, pudo ratificar en el segundo tiempo todo lo bueno que realizó en la primera parte. Y le ganó muy bien por 2-0 a Platense. Así, el Ciclón volvió al triunfo luego de 4 juegos, el último fue ante Argentinos, y la gente lo despidió ovacionado. “Vamos, vamos los pibes”, bramó el Pedro Bidegain.

El Ciclón redujo al Calamar en el primer tiempo. Es cierto que el gol tempranero lo llenó de confianza. Pero el equipo de Insúa fue el que más ganas mostró de ganarlo. Fue protagonista, estaba metido, fue agresivo. Con determinación hacia el arco de adelante. Dominador… Platense, a la espera, estuvo pendiente de cualquier error ajeno que jamás llegó.

A los 15 San Lorenzo encontró la ventaja. Cerutti la mandó adentro del área, Bareiro primero ganó por arriba y después Hernández la empujó, también de cabeza, para vencer la resistencia de Ledesma. El local llegó permanentemente con desbordes, con conexiones por izquierda donde se imponía el tándem Barrios- Mercau. Y casi llega el segundo por un cabezazo de Bareiro tras otro centro del Pocho, pero esta vez el arquero visitante metió un manotazo tremendo y ahogó el grito.

En el segundo tiempo, Martegani, de flojo PT, se quedó en el banco y Giay reapareció tras la gira con la Sub 20: volvió al lateral derecho y Elías se movió a la mitad de la cancha. Y Platense se adelantó en el campo y se animó. Pero lo más claro que tuvo fue al principio, con un remate de Benítez que dio en el costado izquierdo del arco de Batalla, un espectador de lujo en la noche del Nuevo Gasómetro.

Promediando el complemento, el Ciclón volvió a hacerse dueño de la pelota. Tuvo un buen ingreso Maroni, que entró por Barrios (terminó con hielo en el isquio izquierdo), y en una jugaba a pleno toque por la banda derecha le hicieron un penalazo a Gattoni que terminó convirtiendo Cerutti: definió fuerte y a media altura, pero la potencia del disparo venció a Ledesma y entró con suspenso.

Lo que siguió de San Lorenzo fue controlar a un Platense obligado a buscar y tal vez pudo llegar al tercero si acertaba alguna contra que terminó en la nada. Y el Ciclón, así, dejó atrás el mal trago que sufrió en Paraná y los hinchas, ilusionados con el despegue definitivo, despidieron al equipo a pura ovación.