San Lorenzo atraviesa uno de los momentos más delicados de los últimos años. La situación institucional es cada vez más tensa, el escándalo por los videos de Marcelo Moretti no cesa, y el futuro del presidente con licencia sigue sin resolverse. En medio de esa incertidumbre, se esperaba que este viernes se realizara la reunión de Comisión Directiva que iba a tratar el dictamen del Tribunal de Ética del club. Pero apenas unas horas antes de que se lleve a cabo, fue sorpresivamente suspendida.
La convocatoria, pautada para las 14.30, fue cancelada a las 10.40 a través de un comunicado oficial firmado por el secretario general del club, Martín Cigna. ¿El motivo? La presión de la Asociación del Fútbol Argentino, que esta semana intimó a San Lorenzo a abstenerse de tratar el punto 1.7 del orden del día, el cual hacía referencia directa al pedido de expulsión de Moretti como socio y la posible convocatoria a Asamblea para definir su salida definitiva del cargo.
En la nota, el club argumenta que la suspensión se resolvió “a raíz de la solicitud de abstención por parte del Tribunal de Ética de la AFA” y asegura que se tomó la decisión para “no generar ningún perjuicio institucional ni incurrir en posibles infracciones a los estatutos de la AFA, con la responsabilidad que ello conlleva”. También indica que se realizará un análisis jurídico de las normativas para definir cómo avanzar.
Si bien el Tribunal de Ética de San Lorenzo fue contundente en contra de la posición de la AFA, incluso redoblando la apuesta y contestando a través de Leandro Chizzini, su presidente, que no darán marchar atrás, fue, en definitiva, la propia Comisión Directiva —la misma que debía votar la continuidad o expulsión de Moretti— la que bajó la persiana tras la presión del organismo presidido por Chiqui Tapia.
Así, el futuro de Moretti vuelve a quedar en pausa. San Lorenzo estira la definición mientras el clima en el club se torna cada vez más espeso. Por ahora, no hay nueva fecha definida para retomar el tratamiento del tema en Comisión Directiva. Todo quedó en suspenso, y crece el malestar entre los socios e hinchas.
