Pasaron poco más de dos meses desde que se conoció que San Lorenzo quedaba inhibido para éste y los dos próximos mercados de pases. Sin embargo, a solo cinco días del inicio de la competencia oficial, llegó la noticia que Miguel Ángel Russo esperaba: la dirigencia pagó la deuda que venía de arrastre y la FIFA le levantó el castigo.
¿Qué tuvo que pagar el Ciclón? Alrededor de 400.000 dólares que no tenían que ver con deudas de jugadores. Si bien no se conocieron con exactitud los acreedores, de acuerdo a la versión que sale de Boedo tiene que ver con los derechos de formación de algunos futbolistas que el club no pagó en su momento y se fueron acumulando con el correr del tiempo.
De este modo, si es que a San Lorenzo no le cae otra inhibición por estos días, el entrenador podrá contar el sábado ante Talleres con Emanuel Cecchini, el volante que hasta el momento es la única incorporación del Ciclón, y Emiliano Amor, que ya acordó su llegada y se espera que mañana se haga la revisión médica para sumarse al plantel.
Obviamente, también estará en condiciones de jugar cualquier otro futbolista (interesa el delantero colombiano Leonardo Castro) que contrate sobre el cierre del libro de pases, que oficialmente finaliza este miércoles a las 20 horas aunque la AFA podría extender el plazo hasta el 30 de este mes.