Andrés Vombergar volvió a jugar con la selección de Eslovenia y para él fue especial. Esta vez, el delantero de San Lorenzo convirtió su primer gol con el combinado nacional, y lo hizo con un recurso que ya domina a la perfección: el penal. Tal como lo viene haciendo en Boedo, la Bomba gritó desde los doce pasos en el triunfo 2-1 frente a Bosnia y Herzegovina, en condición de local.
El delantero del Ciclón ingresó a los 66 minutos del segundo tiempo en lugar de Blaz Kramer y, a los 88′, se hizo cargo de la ejecución del penal que terminó siendo el segundo tanto de su equipo. Definió suave, al medio, en una muestra más de su temple y eficacia en una jugada clave, como tantas veces lo demostró durante el último semestre.
Y es que, en el Apertura con el Ciclón, Vombergar fue el máximo anotador del equipo con 9 goles en 20 partidos, de los cuales 6 llegaron por esta misma vía (más uno en los cuartos contra Argentinos). Su efectividad desde los doce pasos fue una constante en un semestre difícil, pero en el que él logró destacarse y hasta terminó siendo reconocido entre los mejores jugadores del torneo.
Ahora, antes de tomarse algunos días de descanso y volver a la Argentina para sumarse a la pretemporada que arrancará el 16 de junio, el delantero cerró la fecha FIFA con una sonrisa, aportando lo suyo para la victoria de su país y dejando una vez más en claro que el gol, sobre todo si es de penal, lo acompaña esté donde esté.
