La derrota ante Platense en la semifinal del Torneo Apertura fue un golpe durísimo para San Lorenzo. El equipo había llegado con ilusión a la instancia decisiva, pero terminó quedando afuera de la final de manera dolorosa. Con el plantel ya licenciado y de vacaciones, varios futbolistas compartieron mensajes en sus redes sociales para cerrar el semestre. Y ahora fue el turno de Iker Muniain, el capitán y máximo referente del equipo, que también dejó su reflexión pública.
A través de su cuenta de Instagram, el mediocampista español escribió: “El dolor por no conseguir lo que queríamos es tanto como el orgullo que siento por mis compañeros y nuestra hinchada. Caer y levantarse.” Un mensaje breve, sincero, que refleja el momento anímico del plantel. Pero más allá del contenido, la atención se centra en él porque su continuidad en el club todavía es una incógnita.
El ex Athletic Bilbao tiene contrato vigente hasta diciembre de 2025, pero a partir de junio se activa una cláusula de salida que podría ejecutar tanto el jugador como la institución para finalizar el vínculo antes de tiempo. Por eso, si bien todo indica que regresará para el inicio de la pretemporada el próximo 16 de junio, no hay garantías de que siga jugando en San Lorenzo durante el segundo semestre.
Desde su entorno deslizan que Muniain analiza el escenario con cautela. El contexto institucional —con una crisis interna, el conflicto con Moretti, el nuevo rol de Julio Lopardo y la salida reciente de Miguel Ángel Russo— genera dudas sobre el futuro inmediato del proyecto. A estas dificultades, se suma un factor personal: sus hijos están en España y esa distancia en medio de la inestabilidad, podría pesar en su decisión.
Por ahora, se encuentra en Bilbao descansando junto a su familia. El mensaje que compartió fue futbolístico y no deja entrever ninguna decisión. Pero en Boedo saben que retenerlo no será fácil, y perder a su líder en medio de tanta incertidumbre sería otro golpe difícil de digerir.
