San Lorenzo le ganó de manera agónica a Vélez y volvió al triunfo luego del empate en Mendoza. Luego de sumar los tres puntos, Rubén Insua quedó conforme con el rendimiento de sus jugadores: “Hicimos un buen partido en líneas generales, ganamos en forma merecida. Creo que fue premio al haber ido a buscar todo el partido, sobre todo la última media hora, con decisión en sumar de a tres. Terminó siendo justo el resultado ante un buen rival”.
Después habló de la inclusión del Gordo, que concretó desde los 12 pasos para el 1-0 ante el Fortín: “Cuando se confirmó que había sido penal decidí ponerlo a Ortigoza, que es un especialista y lo pateó muy bien“. Consultado por qué le dijo antes de entrar, dijo, entre risas, “que haga el gol… Ni sé lo que le dije, que entre, que patee el penal y nada más. No había mucho que agregar”.
Al ser consultado por el rendimiento de Malcom Braida, que se acomodó como lateral por izquierda siendo extremo por naturaleza, advirtió que “hizo un muy buen partido” y de inmediato lo relacionó con el resto del equipo, que “tuvo de principio a fin un nivel parejo”, con “varias posibilidades de gol en el primer y el segundo tiempo, con jugadas bien elaboradas” y que “jugó con determinación y mucha energía“.
“Pusimos por momentos cinco o seis jugadores en posición de ataque. Llegamos bien a los últimos metros. Creo que el arquero rival tuvo mucho mérito. Entró gente fresca en ataque, buscamos con Martegani, Leguizamón y Andrés (Vombergar) seguir insistiendo y creo que el resultado terminó premiando a la actitud que tuvo el equipo“, agregó el Gallego.
Consultado por el momento de San Lorenzo, cerró: “A veces un poco más lento, a veces más rápido, pero hemos ido evolucionando con el correr del tiempo. Armar un equipo que pelee cosas importantes no se logra de un día para el otro. Tenemos un plantel con muchos jugadores jóvenes, pero con mucha predisposición, ganar e ilusión para crecer y terminar estando a la altura de lo que representa este club”.