San Lorenzo tendrá tres partidos más por delante para ver si clasifica o no a la siguiente fase de la Copa de la Liga. Y el siguiente compromiso del equipo de Rubén Insua será clave no solo porque necesita de manera imperiosa un triunfo, sino porque además juega el clásico contra Boca en un Nuevo Gasómetro que estará a reventar.
Para dicho encuentro la organización ya dio a conocer que el árbitro principal será Pablo Echavarría. Sin embargo, detrás de la designación del juez de 41 años quedó escondido un nombre que no trae buenos recuerdos por Boedo y tendrá influencia en las decisiones: Jorge Baliño, que estará a cargo del VAR en el partido del próximo miércoles a las 19.
Baliño fue cuestionado por sus actuaciones durante los últimos dos partidos con el CASLA. Primero por perjudicarlo en el 1-2 Barracas Central en la Liga Profesional 2021 omitiendo un claro penal a Adam Bareiro y anulando un gol a Jeremías James. Y lo más reciente, después de mucho tiempo sin dirigirlo, fue en el 1-1 como visitante de Unión en la fecha 3 del vigente torneo.
Ese día, el Gallego terminó el partido y puso en tela de juicio su desempeño abiertamente después de haber expulsado a Carlos Sánchez y a Bareiro y también por no cobrar algunas faltas insólitas sobre el final del partido, cuando San Lorenzo aguantaba como podía con nueve hombres.
Junto a Echavarría, que dirigió al Ciclón 14 veces (seis triunfos, cuatro empates y cuatro derrotas), estarán Gabriel Chade y Pablo González como jueces de línea. Nicolás Lamolina, otro siempre cuestionado, será el cuarto árbitro. Y el que acompañará a Baliño en el AVAR será Rodrigo Rivero.