Leandro Romagnoli recuperó a un jugador que bien podría ser tomado como un refuerzo simbólico. Superada una grave lesión de rodilla, Agustín Hausch irá al banco este domingo contra Boca en La Bombonera y hasta podría sumar minutos en el segundo tiempo si el Pipi así lo dispone.
En principio, la idea del cuerpo técnico era que jugara en Reserva para ir tomando ritmo de competencia. Sin embargo, ante la posibilidad de rotar algunos jugadores frente al Xeneize, prefirió volver a convocarlo en la Primera con el objetivo de que tarde o temprano salte nuevamente a las canchas.
En recuperación de una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, el Gringo venía trabajando en la etapa de ejercicios aeróbicos en el campo desde principios de año. Como su respuesta fue buena, el DT no dudó en llevarlo a la pretemporada y arrancar una puesta a punto en lo físico y lo futbolístico a la par del grupo.
El extremo de 21 años fue intervenido quirúrgicamente el 25 de noviembre pasado, 12 días después de salir lesionado en el partido que el Ciclón le ganó 1-0 a Defensa y Justicia, por la fecha 13 de la Copa de la Liga. Tras recibir un pisotón de Tomás Cardona, fue reemplazado a los 37 minutos del primer tiempo por Iván Leguizamón.
El paso de Hausch por San Lorenzo
El trayecto de Hausch en San Lorenzo no fue el esperado. El pibe pasó de debutar a los 16 años (en febrero de 2020 ante Racing) y ser una de las mejores proyecciones del club a ni siquiera ser tenido en cuenta, situación que lo llevó a empezar a trabajar con un psicólogo y un coach que lo ayudaron para poder superar la situación.
Rubén Insua volvió a considerarlo recién desde septiembre del año pasado, una vez que firmó la renovación de su contrato hasta fines del 2025. Después de entrar y asistir ante Platense, el Gallego le dio titularidad en Florencio Varela. Pero, lo dicho, la dura lesión lo volvió a marginar justo cuando parecía que empezaba el momento de su despegue…
