La derrota ante San Martín de San Juan fue la chispa final. Apenas terminado el partido, la bronca del hincha de San Lorenzo explotó y cientos de socios se concentraron en la puerta del hall principal del Nuevo Gasómetro para hacer sentir su malestar. No se trató de un simple reclamo: fue un grito de hartazgo generalizado.
Con el 1-0 consumado, los cánticos empezaron desde las tribunas y se trasladaron rápidamente hacia la salida del estadio. “Que se vayan todos”, el clásico grito que aparece en los momentos más oscuros del club, retumbó con fuerza en la noche azulgrana. En el foco de los insultos estuvieron Marcelo Moretti, actual presidente, y la dirigencia en su conjunto, a quienes los hinchas les reclamaron elecciones anticipadas y un cambio urgente de rumbo.
Pero el enojo no se detuvo ahí. También hubo cantos contra Claudio “Chiqui” Tapia, a quien los hinchas identifican como parte del entramado de banca a Moretti y que llevó al club a este presente, y también a Néstor Ortigoza. La paciencia se agotó: tras otra derrota dolorosa, el clima se tornó insostenible.
El pedido fue unánime y contundente. “Elecciones ya”, exigieron los hinchas mientras la seguridad reforzaba la zona del hall principal. San Lorenzo no solo se complica en la tabla: también vive una de las crisis institucionales más calientes de los últimos tiempos.
