El calendario se consume y la paciencia comienza a agotarse. Matías Caruzzo presentó su renuncia a raíz del letargo de quienes toman decisiones y a los dirigentes de San Lorenzo les quedan apenas 4 días para negociar y traerle refuerzos a Rubén Insúa, quien está muy preocupado por las demoras en cuanto a las gestiones.
Y en medio del estado de alarma, aparecen las novedades. Porque después de un día agitado, los dirigentes intentan calmar las aguas y comunicaron de manera extraoficial que hay un acuerdo de palabra por Juan Ignacio Méndez, el volante central que, a diferencia de Gonzalo Maroni y Diego Calcaterra, fue uno de los pedidos que hizo el entrenador.
El mendocino de 25 años quedó libre de Talleres de Córdoba a fines de junio y fue uno de los jugadores que el Ciclón buscó a principios de este mercado. Sin embargo, la demora se debió porque esperaba una oferta concreta del exterior que jamás llegó y por eso, en medio del caos, los dirigentes afirman que ahora sí está asegurada su llegada a Boedo.
En principio, atado al comunicado que la AFA emitió el martes pasado, el contrato de Méndez con San Lorenzo sería de solo seis meses con una opción a renovarlo por un año más. Por la tarde se haría la revisión médica y, si todo marcha en condiciones, estampará la firma con la institución azulgrana.