En San Lorenzo cambió el año pero se mantienen los problemas. La derrota contra Gimnasia, que dejó al Ciclón sin chance alguna de pelear por la Copa Maradona de manera prematura, profundizó la crisis institucional y futbolística que atraviesa el club. A partir de ahí, aunque las responsabilidades son compartidas, la continuidad de Mariano Soso al frente del equipo ahora está en duda.
Después de otro flojo rendimiento y el 2-1 con el Lobo, ya nada parece estar tan firme como lo parecía hasta el momento. Al entrenador se lo cuestiona por varios puntos. Desde el armado de los equipos hasta por quedar expuestos por los cambios. Pero, sin dudas, la falta de resultados y que no se vislumbre un plan de juego serían los detonantes.
Si bien el técnico no tiene ninguna confirmación sobre su futuro (en conferencia dijo que todavía no habló con ningún dirigente), lo cierto es que no está garantizado que dirija el próximo fin de semana contra Banfield. De hecho, aunque puede que sea porque San Lorenzo ya no pelea por nada, el entrenamiento que estaba pautado para este martes por la mañana quedó suspendido y se viene un día de reuniones: primero entre los dirigentes y la Secretaría Técnica y después se juntarían con el DT.
Lo cierto es que desde hace un tiempo a Soso lo vienen mirando de reojo en Boedo y ahora, después del golpazo que sufrió con Gimnasia, más que nunca. Si bien todavía tiene contrato vigente por un año y medio más, es posible que su ciclo finalice prematuramente. Habrá que estar atentos a lo que pueda pasar en las próximas horas…
