La espera se acabó. Ricardo Centurión quedó a disposición de Troglio, el técnico que lo llamó y pidió por su llegada. “Siempre los buenos jugadores traen soluciones”, había mencionado Pedro en su momento. Y, por fin, ya tiene en su plantel al jugador que puede darle un salto de calidad a su equipo.
En la Ciudad Deportiva, después de un día agitado que incluyó revisión médica, firma de contrato y presentación en los medios oficiales del club, Ricky conoció a sus nuevos compañeros y también mantuvo una charla con el entrenador y su cuerpo técnico. Así fue la previa al inicio de su primer entrenamiento en Boedo.
Centu arrancó el año trabajando apartado del grupo en Vélez, donde no era tenido en cuenta por un conflicto con Mauricio Pellegrino, y desde el 11 de enero lo hacía por su cuenta tras bajarse de la pretemporada en la Villa Olímpica. Ahora, claro, deberá nivelarse con el resto del plantel antes de que Troglio crea que está en condiciones de salir a la cancha.
“Vengo a buscar a minutos. Hace cinco meses que no juego, es la realidad. Pero ya quiero ponerme a punto y estar a disposición del técnico y de los compañeros”, se sinceró Centurión luego de superar los exámenes médicos. Razón no le falta: durante el último semestre jugó poco y su último partido fue hace más de dos meses: el 19/11, ante Talleres, cuando apenas sumó cinco minutos.