Son dos millones y medio de dólares, más intereses, los que debe pagar San Lorenzo para levantar la inhibición que pesa sobre el club y le impide incorporar futbolistas por tres mercados de pases. La sentencia del TAS recayó porque nunca le pagó a Palestino de Chile por la mitad del pase de Paulo Díaz, que se fue al Al-Hilal de Arabia Saudita a mediados del 2018.
La novedad por estas horas desde Boedo empiezan a saldar la deuda. Los dirigentes obtuvieron el permiso del Banco Central para girarle un millón y medio de dólares y el resto lo pagará en un plan de cuotas a partir de enero luego que los trasandinos aprobaran las garantías bancarias que exigieron para que se pueda avanzar.
Es decir, el Ciclón todavía está inhibido hasta que se abone el monto total de la deuda. “Hay una mejor predisposición de San Lorenzo a pagar lo que se debe a Palestino. Aquí no hay mucho que hacer, en cuanto esté pagada la deuda total se levanta la inhibición”, le dijo Jorge Uauy, el presidente de la institución chilena, en Clarín.
La idea en San Lorenzo es terminar con este conflicto antes de que cierre el próximo libro de pases en el fútbol argentino. Si esto se cumple, los jugadores que llegarían para reforzar el plantel durante la pretemporada podrán ser considerados para arrancar el campeonato local, que arranca en la primera semana de febrero.