No pudo San Lorenzo seguirle el ritmo a River. En un partido parejo, el equipo de Rubén Insúa no pudo ni supo superar a Defensa y Justicia y hubo empate entre el segundo y el tercero de la tabla. Fue 0-0 en el Nuevo Gasómetro y el Millonario empieza a escaparse en la cima del torneo: quedó a ocho puntos.
No fue bueno el primer tiempo de San Lorenzo. Le costó agarrar la pelota contra un equipo que suele tener buena posesión, que suele tener un estilo definido desde hace tiempo. No se desesperó el Ciclón en recuperarla, se agazapó a la espera de salir disparado para contragolpear. Pero esa posibilidad no llegó. Intentó con la sociedad de siempre entre Barrios y Braida, pero no supo cómo acercarse al área rival. Bareiro quedó aislado. Vombergar, desconectado. Difícil así…
En este contexto, la visita contó con dos posibilidades: la primera en el arranque del partido con un cabezazo apenas desviado de Cardona y la segunda, un pelotazo de Togni que paró Batalla. ¿Y qué hizo San Lorenzo en ataque? Apenas tuvo un cabezazo de Braida que Cardona salvó sobre la línea sobre el final de la etapa. Pero poco, muy poco para un equipo que tenía la obligación de ir al frente.
En el complemento, el Gallego dispuso el ingreso de Luján y Leguizamón por Giay y Vombergar. Más tarde, Martegani entró por La Roca Sánchez. Ahí se soltó y comenzó a merodear el área rival, pero le costó entrar. De hecho, las mejores chances fueron con remates lejanos: un zurdazo de Marta que bloqueó Unsaín y un zapatazo de Leguizamón que el arquero del Halcón despejó al córner. Sobre el final, los nervios empezaron a jugar su partido, la visita terminó mejor y para San Lorenzo fue un empate con sabor a poco.