Hablar de Rubén Darío Insúa es hablar de la resurrección de San Lorenzo. De cambiar el andar de un club que iba a la deriva, que se comía los técnicos y que estuvo mucho tiempo más preocupado por mirar la tabla de los promedios que objetivos de gloria. Cambió la mentalidad del grupo, empezó dándole solidez defensiva, lo clasificó a una Copa y hoy hasta se anima a soñar con un nuevo campeonato.
A lo largo de estos 365 días, el Gallego ya dirigió 47 partidos, en cuatro competiciones diferentes, en los que sacó el 58,2% de los puntos, a razón de 21 victorias, 19 empates y siete derrotas. Todo comenzó el 4 de julio del año pasado, frente a Independiente en el Nuevo Gasómetro, donde su equipo empató 1 a 1 con gol de Adam Bareiro.
En ese lapso de tiempo, San Lorenzo convirtió 54 tantos y sufrió solamente 31. Y una de las grandes particularidades es que en lo que va del 2023 es que el Ciclón, además de ser el equipo con menos goles en contra del torneo, ya hizo historia: es récord porque llegó a los 1040 minutos consecutivos con la valla invicta como local en torneos organizados por la AFA.
Para poner en contexto lo que significó la llegada de Insúa, con él San Lorenzo cortó varias rachas negativas que venían de larga data. Por caso, la victoria por 2 a 1 contra Boca del campeonato pasado cortó con una sequía de cinco años sin poder ganar un clásico en el Pedro Bidegain. Ese triunfo también fue importante porque por primera vez sumaba de a tres jugando de local en 2022.
¿Más? Claro. De la mano del Gallego, el Ciclón volvió a conseguir dos triunfos en fila después de ¡52 partidos! Fue entre la fecha 14 y 15, en la que derrotó a Platense por 2 a 0 y a Racing por 2 a 1. Luego, su equipo llegó a tres en fila, algo que no hacía desde 2020 en un interinato de Diego Monarriz, y hasta cuatro, cifra que no conseguía desde 2018 en el ciclo de Pampa Biaggio.
Con Insúa, además, el Nuevo Gasómetro se convirtió en un fuerte: lleva once partidos sin perder en casa por torneos locales (la última vez fue con 0-1 River) y sumó el 65,1% de los puntos en los 22 encuentro que jugó en esa condición, producto de 11 triunfos, diez igualdades y esa derrota con el Millonario. Sí, las estadísticas hablan por sí solas.
