La historia terminó. Los dirigentes de San Lorenzo no acordaron su renovación y le bajaron el martillo: Víctor Salazar no va a continuar su carrera en Boedo. El contrato del lateral finaliza el 30 de junio y, con su salida, el club se desprenderá de otro salario en esa búsqueda que tienen de acomodar una economía que está en rojo.
El Tucu desembarcó a mediados del 2017. En ese momento, el futbolista llegó proveniente de Rosario Central en una costosa operación. Fue a cambio de 1.800.000 dólares por el 80% de su ficha y a principios del 2019 tuvo que poner otros 400 mil más para quedar con la totalidad del pase. Hoy se va libre y sin que el Ciclón pueda recuperar un solo peso de su inversión.
En San Lorenzo nunca logró consolidarse. Encima, una lesión lo castigó en su mejor momento. El 21 de septiembre del 2019, en un partido contra Boca en el Nuevo Gasómetro, se rompió el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda. El 12 de agosto del año pasado, recién pudo a volver a entrenar con el grupo. Pero no fue lo mismo y tanto Peruzzi como Herrera fueron los elegidos antes que el Tucu.
Salazar, de 28 años, convirtió un gol en los 64 partidos que disputó en San Lorenzo. Y si bien terminó jugando y hasta se había analizado la posibilidad de tratar de negociar su continuidad por la posible salida del Yacaré, esa opción quedó totalmente descartada y se va con el pase en su poder. Su próximo destino será Olimpia de Paraguay.
