A mediados del año pasado, San Lorenzo adquirió a los hermanos Pittón. Sin embargo, el rodaje que tuvo cada uno en Boedo fue bien distinto: Bruno se consolidó y fue una de las figuras del equipo, mientras que Mauro jugó poco y no logró asentarse. Por eso, lo pusieron en vidriera y no le faltaron pretendientes.
Varios fueron los equipos interesados en contar los servicios del volante de 25 años durante estos días de receso, pero el que aceleró en los últimos días fue Vélez y terminó quedándose con el jugador. Hoy se confirmó que abandonará la pretemporada en Cardales para sumarse al equipo que comanda Gabriel Heinze.
¿Cómo fue la operación? Vendió la totalidad del porcentaje de la ficha que poseía de Mauro, el 70%, a cambio de un millón y medio de dólares. Así, con tan solo ocho partidos jugados durante el semestre con la camiseta azulgrana (tres como titular, sin goles) se despide de Boedo sin pena ni gloria.
Cabe recordar que el Ciclón había adquirido el combo de los hermanos santafecinos a cambio de 2.500 millones de dólares y que si bien mantuvo un conflicto con el Tatengue por falta de pago que hasta fue denunciado ante la Superliga), hace unas semanas renegoció la deuda y empezó a regularizar la situación (pagó tres de cinco cuotas).